
La pobreza puede afectar a cualquiera
Pobreza: ¿qué es realmente? ¿Es la pobreza una vergüenza? ¿Te priva de tu dignidad humana? ¿Por qué tantos ignoramos la pobreza, hasta que quizás nos golpea el destino? Aquí nadie tiene que pasar hambre, ni funciona nuestro estado de bienestar. Y, sin embargo, incluso aquí, cada vez menos gente puede permitirse comprar alimentos saludables en un supermercado. Debido a decisiones políticas cuestionables, etc., el coste de la vida se está volviendo cada vez más caro e inasequible para muchos. Los alquileres excesivos y los costes energéticos están hundiendo a muchas personas en el endeudamiento. Las empresas se ven obligadas a cerrar y, como consecuencia, muchas personas pierden sus empleos. La proporción de personas en nuestro país que pertenecen a la llamada clase baja está creciendo. Aunque en Alemania actualmente nos va bien, a nivel internacional, en comparación con la mayoría de los países del mundo, también aquí las clases sociales han estado segregadas durante mucho tiempo. Recuerdo mi época en un instituto en la década de 1970. El instituto era casi exclusivamente para hijos de personas adineradas. Yo era el único niño de clase trabajadora. Mis amigos me invitaban a sus cumpleaños, pero siempre me pedían: «Por favor, no les digas a mis padres que tu padre es solo un trabajador, si no, ya no podré invitarte». En esencia, eso no ha cambiado. Señalamos a países como India con su sistema de castas, pero en el fondo, aquí tampoco es tan diferente. Las clases alta, media, baja y baja son nuestros «pobres», que viven en zonas socialmente desfavorecidas, en apartamentos diminutos y deteriorados en zonas que la gente prefiere evitar, o que ya ni siquiera tienen casa. Un buen amigo sirio me dijo una vez: «Ustedes los alemanes son raros. Su primera pregunta siempre es: ¿A qué se dedican? Se les trata como corresponde. Aquí en Siria, la profesión y los ingresos no importan. Les preguntamos a los demás: ¿Cómo se llaman? ¿Les va bien a ti y a tu familia? ¿Puedo invitarlos a casa?». Entonces, ¿qué es la pobreza? ¿Cómo la determinamos exactamente? ¿O acaso la pobreza no es también una verdadera oportunidad para que la "clase alta" mire más allá de su propio mundo ideal y vea qué es exactamente lo que la hace pobre? ¿Una clase que ni siquiera ofrece a la mayoría de las personas la oportunidad de escapar de la clase en la que nacieron? ¿Quién de nosotros está realmente dispuesto a apoyar a una persona así renunciando a sus propios lujos y, en cambio, ayudando a los necesitados para que también puedan vivir una vida digna? No lo olvidemos nunca: la pobreza puede golpear a cualquiera. Un golpe del destino basta.